Orbitando a Saturno a una distancia media de casi 1 500 000 Km en poco más de 21 días, la pequeña luna Hiperión se parece mucho a un coral o una esponja, con su superficie completamente marcada por cráteres y una forma irregular (360x280x225 Km). Con su tamaño debería haber tenido una forma más o menos esférica, al igual que otras lunas de similares dimensiones. Lo irregular de su forma hace creer a los astrónomos que podría haberse formado como consecuencia del impacto y posterior fragmentación de una luna mayor con otro cuerpo.
Una de las fotos más espectaculares de esta luna, captada por la sonda Cassini en 2005
Pues ya pasó el eclipse, y aunque en Canarias apenas pudimos disfrutar de él, en otras partes del mundo (especialmente en América) tuvieron la ocasión de contemplar un hermoso espectáculo. A continuación, algunas de las imágenes (y vídeo) tomadas por aficionados en el mundo:
Comienzo de la fase de Umbra, desde Gran Canaria. Fotografía cortesía de Astroeduca
Impresionante secuencia del eclipse, captada por Carlos Di Nallo desde Argentina.
Hermosísima toma de la fase total del eclipse, tomada por Alan Dyer, desde Alberta, Canadá
El 15 de diciembre de 2010, en la célebre web Astronomy Picture of the Day de la NASA, se publicó un magnífico vídeo realizado a partir de fotografías tomadas por el Observatorio de Dinámica Solar, lanzado al espacio este mismo año. En el vídeo podemos ver cómo un gigantesco filamento solar entra en erupción, provocando una eyección de masa coronal (CME). Este tipo de eyecciones alcanza velocidades que van desde los 20 Km/s hasta los 3200 Km/s y suele expulsar al espacio más de mil millones de toneladas de materia solar. Normalmente, el Sol suele perder unos 6000 millones de toneladas por hora de materia en forma de viento solar (compuesto por un 73% de hidrógeno y un 25% de helio, con algunas trazas de otras partículas). Esto significa que perdería una masa equivalente a la de nuestro planeta cada 150 millones de años.
Este tipo de erupciones solares están muy relacionadas con los ciclos de actividad del Sol, que se repiten en un período de unos 11 años. Recientemente se ha dejado atrás el punto mínimo de actividad de un ciclo, con lo que es factible que este tipo de eventos sea más frecuente a medida que nos acerquemos al máximo de actividad solar, previsto para el año 2011 ó 2012.
Para hacernos una idea de las dimensiones del filamento (en la zona inferior izquierda de la imagen) hemos de tener en cuenta que el Sol tiene un diámetro de casi 1 400 000 Km
Con 4800 Km de diámetro, Calisto es el tercer satélite en tamaño del Sistema Solar (detrás de Ganímedes y Titán). Aunque tiene casi el 99% del diámetro del planeta Mercurio, sólo tiene 1/3 de su masa. Orbita al gigantesco Júpiter a más de 1 800 000 Kilómetros empleando poco más de 16 días en completar una vuelta alrededor del planeta.
La gran distancia que le separa de Júpiter hace que la cantidad de radiación que recibe del gigante gaseoso sea muy baja comparándola con la que reciben las otras grandes lunas de Júpiter (Ío, Europa y Ganímedes). Al igual que muchas otras lunas del Sistema Solar, tiene rotación síncrona, es decir, presenta siempre la misma cara a Júpiter.
Comparación de los tamaños de Calisto, la Luna y la Tierra
Podemos ver que la superficie de Calisto presenta una alta densidad de cráteres de impacto
Cástor y Póllux (Polideuco para los griegos) eran gemelos, hijos de Leda, pero de padres diferentes. Mientras que Cástor era hijo del rey Tíndaro de Esparta, Póllux tenía como progenitor al mismísimo Zeus, el cual se convirtió en un cisne para seducir a Leda. Las diferentes versiones de este mito son algo confusas, ya que algunas otorgan la paternidad de ambos al rey Tíndaro, mientras que otras se decantan por Zeus (ambos gemelos nacerían de un huevo puesto por Leda). Lo cierto es que los antiguos griegos consideraban a Póllux como el inmortal de los dos gemelos.
Ambos gemelos formaban parte de la afamada tripulación de la nave Argos (los Argonautas), comandada por Jasón, el cual iba en pos del Vellocino de Oro (epopeya contada por Apolonio de Rodas en su obra las Argonáuticas).
Cástor y Póllux raptaron a las hijas de Leucipo, para desposarse con ellas. Esa acción conllevó un enfrentamiento con los prometidos de ambas doncellas, Ida y Linceo, que mataron a Cástor. Póllux, que gozaba del don de la inmortalidad, convenció a Zeus para que le concediera ese don a su hermano gemelo. Zeus accedió a que ambos hermanos pasasen seis meses en el Olimpo por su condición de inmortales y otros seis en el Hades, como mortales fallecidos. Posteriormente ambos hermanos ascenderían a los cielos en la constelación de Géminis, o Gemini.
Astronómicamente, Gemini es una de las constelaciones del Zodíaco, y el Sol pasa por ella entre el 21 de junio y el 21 de julio. Astrológicamente las fechas van desde el 22 de mayo al 21 de junio… pero como en los últimos 2000 años el eje de rotación de la Tierra ha variado su inclinación, han cambiado las fechas, una 'minucia' que no afecta a los astrólogos (ni a la falta de verosimilitud de sus afirmaciones, de paso)
En estas fechas tiene lugar una de las más intensas (aunque poco conocidas por el gran público) lluvias de estrellas del año, las Gemínidas. Como su nombre indica, el radiante (punto desde el que parecen salir las estrellas fugaces) está en la constelación de Gemini, visible muy claramente en el cielo, justo al lado de la espectacular constelación de Orión.
Este año, la mayor actividad se producirá entre los días 12 y 15 de diciembre, siendo el mejor momento de la observación a partir de las 02:00 hora local (aunque el radiante aparece por el horizonte a partir de las 19:00), cuando la Luna Creciente se ponga en el horizonte y la constelación de Gemini esté en su punto más alto.
Simulación del cielo a las 02:00 de la noche del 13 al 14 de diciembre, mirando hacia el cénit.
El próximo 21 de diciembre, tendremos la ocasión de disfrutar de uno de los más bonitos espectáculos que nos regala la naturaleza. Poco antes del amanecer, la Tierra se interpondrá entre el Sol y la Luna llena (los eclipses de Luna se producen siempre cuando está llena), eclipsándola.
El especialista de la NASA en eclipses, Fred Espenak (también conocido como Mr. Eclipse) ha preparado unos gráficos que facilitarán la observación de este bonito fenómeno. Se estima que la fase total del eclipse durará una hora y 12 minutos.
Fases del próximo eclipse lunar (las horas son válidas para la zona horaria de Greenwich)
Zonas donde se podrá ver el eclipse. Los observadores situados en América disfrutarán de las mejores condiciones
Una de las características más llamativas de los eclipses lunares es que la Luna enrojece, tal y como podemos comprobar en las siguientes imágenes. Esto es debido a que la atmósfera terrestre actúa como filtro de la luz azul, dispersándola (por eso el cielo tiene el tono azulado). La luz roja, sin embargo, atraviesa la atmósfera terrestre e ilumina a nuestro satélite durante los eclipses, dándole ese color tan característico.
Las siguientes imágenes las tomé durante el eclipse lunar del 3 de marzo de 2007, desde San Mateo, en Gran Canaria. No tendremos ocasión de ver otro eclipse lunar total hasta el 15 de junio de 2011.
El siguiente vídeo nos muestra de manera acelerada las distintas fases del eclipse lunar de marzo de 2007, desde Atenas:
¡Disfruten del espectáculo! :)
ACTUALIZACIÓN (21 de diciembre de 2010): En este enlace podrán ver algunas de las imágenes tomadas por aficionados de todo el mundo del eclipse, espero que les gusten.
Orbitando al gigantesco Saturno, se encuentra una luna cuyo parecido con la famosa 'Estrella de la Muerte' de la saga de Star Wars es más que notable. Este parecido no es más que una coincidencia, ya que esta luna fue fotografiada por primera vez en 1980, tres años después del estreno de la famosísima película.
¿A que se parecen bastante?
Se trata de Mimas, una de las 61 lunas conocidas de Saturno. Su diámetro no alcanza los 400 Km y es el cuerpo más pequeño del Sistema Solar en tener forma esférica debido a su gravedad, aunque en realidad no es perfectamente esférico, ya que las intensas fuerzas de marea gravitatoria de Saturno hace que tenga una forma ligeramente ovalada. Fue descubierta el 17 de septiembre de 1789 por William Herschel.
La característica más reseñable de su superficie es el cráter Herschel, de 130 Kilómetros de diámetro (las paredes exteriores del cráter se elevan a una altura de 5 Km). Si existiera en la Tierra un cráter de las mismas proporciones tendría un diámetro de unos 4000 Km (la distancia que hay entre las ciudades de Nueva York y Los Ángeles). Probablemente se produjo por la colisión con un cometa de unos 5 Km de diámetro a una velocidad de unos 30 Km/s. Algunos estudios apuntan a que si el cometa hubiera sido mayor o la velocidad más alta, probablemente el satélite hubiera quedado destruido por la fuerza del impacto.
Orbita a Saturno a una distancia media de 185 000 Kilómetros y emplea poco más de 22 horas en completar una órbita. La temperatura media en su superficie es de unos 64 K (-210 ºC)
Primer plano del cráter Herschel
Fotografía de Mimas hecha a partir de un mosaico de diferentes imágenes tomadas por la sonda espacial Cassini
El puntito oscuro que se ve sobre la superficie de Saturno es Mimas
Esta pequeña luna helada es toda una caja de sorpresas, la última de ellas ha sido revelada por la sonda Cassini en febrero de 2010 al hacer fotografías en el infrarrojo para determinar la distribución de temperaturas en su superficie. El resultado esperado era una distribución más o menos uniforme, pero la realidad nos ha mostrado… esto:
¿A alguien más le recuerda a la forma del videojuego Pac-man?
Fotomontaje con la distribución esperada de temperaturas y la real
¿Otra Estrella de la Muerte en el Sistema Solar? Es el cráter Odysseus, de 400 Km de diámetro en Tetis, de unos 1000 Km de diámetro
Ganímedes era un joven príncipe troyano de excepcional belleza, hasta tal punto que el mismísimo Zeus se enamoró de él y transformándose en águila, lo raptó en el monte Ida, llevándoselo consigo al Olimpo. Allí se convirtió en su amante y en el copero de los dioses, sustituyendo a Hebe. Para paliar la angustia del padre del joven príncipe, Zeus le envió a Hermes para que le asegurara que su hijo era ahora inmortal y que el puesto que ostentaba en el Olimpo era de mucho prestigio; además le regaló unos caballos que eran tan rápidos que podían correr sobre el agua. Otros mitos sugieren que posteriormente Zeus lo ascendió a los cielos convirtiéndolo en la constelación de Aquarius.
Con más de 5200 Kilómetros de diámetro, Ganímedes es el mayor de los satélites del Sistema Solar. Es mayor incluso que el planeta Mercurio (de tan sólo 4800 Km de diámetro), aunque apenas tiene la mitad de su masa, aunque es el satélite más masivo del Sistema Solar, con el doble de masa de nuestra Luna. Orbita al descomunal Júpiter a una distancia media de un millón de Kilómetros. La temperatura media en la superficie es de 110 K (-160ºC). Mediciones hechas por la sonda espacial Galileo durante su misión orbitando el sistema joviano revelan que Ganímedes tiene una magnetosfera, lo que sugiere un núcleo rico en hierro.
Ganímedes fotografiado por la sonda Galileo en 1996
Comparativa de tamaños entre Ganímedes, la Luna y nuestro planeta
Ganímedes y Júpiter, fotografiados desde la sonda Cassini, de camino a Saturno
Su helada superficie es una mezcla de dos tipos de terreno muy diferenciados, unas zonas (las más antiguas) son oscuras y llenas de cráteres, ocupan alrededor de una tercera parte de la superficie del satélite. Las más claras son algo más recientes y están surcadas por una serie de anillos y ranuras de origen tectónico, probablemente. Los cráteres situados en las zonas más antiguas del terreno, fuertemente desgastados y sin apenas relieve, reciben el nombre de palimpsestos. Además se cree que a unos 200 Km de profundidad bajo la superficie podría existir un océano de agua salada.
Detalle de la superficie del satélite. Las diferencias notorias entre diferentes zonas sugieren que en el pasado pudo haber actividad tectónica
Esta imagen captada por la sonda Galileo en Mayo de 2000, muestra la diferencia entre zonas geológicas de diferente edad. Nicholson Regio (a la izquierda) es la más antigua; Harpagia Sulcus (a la derecha) es mucho más reciente, lo que explica la menor densidad de cráteres
Cadena de cráteres de impacto, producidos seguramente por un cometa o asteroide que se fragmentó antes de caer
Una imagen poco usual, el gigantesco Júpiter eclipsa a Ganímedes. Fotografía del telescopio espacial Hubble
El siguiente vídeo muestra un día de rotación de esta luna
En este vídeo se condensan dos horas de tiempo, vemos cómo Ganímedes se esconde detrás de Júpiter. Las imágenes fueron tomadas por el HST
Ayer, en la conocida página web Astronomy Picture of the Day, de la NASA, publicaron un hermosísimo timelapse realizado por el noruego Tor Even Mathisen, donde se puede disfrutar de la belleza de las auroras boreales sobre la ciudad noruega de Tromsø. El año pasado ya hablábamos acerca del origen de las auroras en este blog, pero sólo se habían publicado fotografías, espero que los vídeos de hoy les gusten tanto como a mi.
¡Disfruten de uno de los más bellos espectáculos de la naturaleza!
En estas fechas, se produce una de las lluvias de estrellas más conocidas por los aficionados. Nos referimos a las Leónidas, que toman su nombre de la constelación de Leo, desde la que parecen irradiar. Al igual que las Perseidas y el resto de las lluvias de estrellas, las Leónidas están asociadas a un cometa (en este caso el Temple-Tuttle), que es el que genera el rastro de las partículas que posteriormente será interceptado por la órbita de la Tierra, cayendo sobre la atmósfera y produciendo el siempre bonito espectáculo de las estrellas fugaces.
El Temple-Tuttle tiene un periodo de unos 33 años, y normalmente las lluvias suelen ser especialmente intensas cuando la Tierra intercepta la órbita del cometa poco después de su paso por el perihelio. Es de las pocas lluvias que de vez en cuando tienen asociados picos realmente espectaculares de actividad, llegando a producirse auténticas tormentas de meteoros.
El radiante de esta lluvia de estrellas se encuentra en la constelación de Leo. Aspecto del cielo hacia el este a las 3 de la madrugada del 19 de noviembre. Captura de pantalla del programa Stellarium
Grabado que representa una de las tormentas de meteoros más espectaculares de la historia: las Leónidas de 1833 (se contabilizaron hasta 240 000 meteoros)
Las tormentas más espectaculares que se han registrado han sido las siguientes: 1833 (240 000 meteoros en 6 horas), 1866 (unos 6000 meteoros por hora), 1966 (más de 100 000 meteoros por hora durante un corto intervalo de tiempo), en 1999, 2000 y 2001 se registraron unos 3000 meteoros por hora.
Los meteoros que conforman la lluvia de estrellas de las Leónidas se encuentran entre los más rápidos conocidos, llegando a alcanzar velocidades de 72 Km por segundo (superando incluso a las rápidas Perseidas, que alcanzan unos 60 Km/s).
Imagen de un bólido (magnitud -7) junto a un meteoro durante la tormenta de meteoros de las Leónidas de 1998. Fotografía cortesía de Astroeduca
El siguiente vídeo muestra de una forma bastante sencilla cómo se produce este bonito fenómeno.
Según la web de SOMYCE, no se espera una gran actividad para este año, alrededor de 20 meteoros por hora la noche del máximo del 17 al 18 de noviembre, aunque nunca se sabe, a veces la visión de algún bólido (más brillante que el planeta Venus) puede hacer que valga la pena afrontar el frío de la noche. En este enlace, la NASA ofrece una herramienta que estima la actividad de la lluvia en tu zona.
Esta frase seguramente será reconocida por los apasionados de la saga de 2001, una Odisea en el Espacio, de Arthur C. Clarke. Para quienes aún no hayan tenido la oportunidad de leer esta magnífica saga de novelas de uno de los más grandes escritores de la ciencia ficción, quizás sea ahora un buen momento para hacerlo.
Volviendo a Europa… ¿qué tiene de especial? Como ya vimos en el post acerca de Júpiter, Europa es una de las cuatro grandes lunas (de las 63 descubiertas hasta ahora) del mayor planeta del Sistema Solar. Fue descubierta junto con Ío, Ganímedes y Calisto por Galileo Galilei la noche del 7 de enero de 1610, cuando apuntó a Júpiter por primera vez con su modesto telescopio.
Comparativa de tamaños entre Europa, la Luna y la Tierra
Con poco más de 3100 Km de diámetro, orbita a Júpiter a una distancia media de unos 670 000 Km. Su temperatura media es de 110 K en el ecuador (-163 ºC) y tan sólo 50K (-223 ºC) en los polos, y está completamente cubierta por un espeso manto de hielo (se estima que tiene entre 10 y 30 Km de espesor). La superficie del satélite es bastante lisa, con accidentes que raramente superan el centenar de metros de altura. Sólo tres cráteres de impacto superan los 5 Km de diámetro, siendo el mayor de ellos el Pwyll, de 39 Km. Fluctuaciones en el campo magnético de la luna detectadas por la sonda Galileo, así como las múltiples fracturas que se han encontrado en su manto de hielo, hacen creer que bajo él podría existir un océano de agua líquida (de hasta 90 Km de profundidad).
Representación del interior de Europa. Bajo una espesa capa de hielo, se sospecha que existe un océano (¿de agua líquida?)
Dos posibles modelos de Europa: en el primero, bajo el manto de hielo se encontraría una capa de hielo semifundido, en el segundo existiría un océano de agua líquida
Superficie de Europa en color real, fotografiada por la sonda Galileo
Detalle de una de las características geológicas más significativas de esta luna: las vetas oscuras que surcan su superficie llamadas lineae, muy probablemente producidas por procesos internos
Detalle en color mejorado (para apreciar mejor las diferencias entre las distintas zonas) de la superficie de Europa, fotografiada por la sonda Galileo en 1996
Ío y Europa frente a Júpiter. Fotografiadas por la sonda Voyager 1 en 1979 a una distancia de unos 20 millones de Kilómetros
También Europa tiene asociada una leyenda mitológica. Según esta leyenda, Europa era hija de los reyes de Fenicia y Tiro, Agénor y Telefasa. Zeus se enamoró de ella y para seducirla se transformó en un toro blanco, mezclándose con el ganado de su padre. Mientras paseaba con su séquito cogiendo flores, Europa se maravilló ante la hermosura del toro y acarició sus costados; viendo que era dócil, se montó sobre él y Zeus aprovechó ese momento para raptarla corriendo hacia el mar y nadando hasta la isla de Creta. Una vez allí, le desveló su identidad y la sedujo, convirtiéndola posteriormente en reina de Creta.
El siguiente vídeo es una recreación de lo que podría ser una futura misión que encontrara vida en los océanos de Europa. De hecho, hay un proyecto entre diversas agencias espaciales (NASA, ESA, y probablemente se unan Rocosmos y JAXA) para lanzar una misión conjunta (hacia el año 2020) con el propósito de estudiar mejor las lunas jovianas.
Cuenta la leyenda que la ninfa Ío, de excepcional belleza, era una sacerdotisa de la diosa Hera. Cuenta además que Zeus, enamorándose perdidamente de ella, la poseyó y que posteriormente la transformó en una ternera para protegerla de los celos de su esposa Hera. Sin embargo, Hera sospechó de la hermosa apariencia de la ternera y se la pidió a Zeus como regalo, que no pudo negarse. Posteriormente, le encargó al gigante Argos (el de los cien ojos) que la custodiara en Nemea. Argos era un vigilante muy efectivo, ya que siempre algunos de sus ojos estaban abiertos cuando los otros dormían.
Para rescatar a su amante, Zeus envió a su hijo, el también dios Hermes, el cual se transformó en un pastor y le ofreció vino y conversación a Argos. El vino resultó delicioso, y la prolongada y aburrida conversación que el astuto Hermes le dió a Argos fue suficiente para que uno a uno, se le fueran cerrando todos los ojos. Una vez domido, le cortó la cabeza y liberó a Ío. Al enterarse Hera de la muerte de Argos, puso sus ojos en la cola de su ave favorita, el pavo real.
Mercurio y Argos, de Diego Velázquez (1659) Museo del Prado
Juno recibiendo la cabeza de Argos. Jacopo Amigoni
Hera no cejó en su empeño de vengarse de la infortunada ninfa, así que le envió un tábano que la mortificaba con continuas y dolorosas picaduras. Para huir del tábano Ío (aún transformada en ternera) se arrojó al mar (a este mar se le conoce desde entonces como el Mar Jónico), y estuvo huyendo sin cesar, pasando por Illiria, Tracia y el Cáucaso, finalmente pudo llegar a Egipto, donde Zeus volvió a darle forma humana, dando fin así a su sufrimiento.
Al igual que la ninfa que le da nombre, la luna Ío de Júpiter es una luna realmente atormentada. Con 3640 Km de diámetro (apenas un poco mayor que nuestra Luna), orbita al gigantesco Júpiter a una distancia de tan sólo 421 000 Km (poca cosa, teniendo en cuenta las colosales dimensiones del planeta). Esta cercanía al mayor y más masivo de los planetas (él sólo tiene más del doble de la masa del resto de los planetas juntos) y la resonancia de su órbita con las de Ganímedes y Europa (otras de las grandes lunas de Júpiter) hacen que las fuerzas de marea gravitatoria sean intensísimas, provocando una tremenda inestabilidad en las capas internas de la luna, que prácticamente se encuentran en ebullición. Por ello, Ío es el cuerpo del sistema solar geológicamente más activo, con más de 400 volcanes en continua erupción.
Aparte de los volcanes, Ío cuenta con más de un centenar de montañas, creadas por la intensa presión que el manto de esta luna ejerce sobre su corteza. Algunas de las montañas son altísimas, Boösale Montes tiene una altura de unos 17 000 metros, el doble que el Everest, la mayor montaña de la Tierra (8848 m).
En esta animación puede verse las enormes proporciones de la erupción volcánica del volcán Tvashtar en Ío (más de 300 Km de altura)
La temperatura media en la superficie de esta luna es de unos 130 K (-143º C). La composición de su atmósfera es básicamente dióxido de azufre (SO2) y trazas de otros elementos.
Detalle de algunos volcanes en Ío, fotografiados por la sonda Galileo
Ío en color real, fotografiada por la sonda Galileo.
En la imagen anterior se puede apreciar que su superficie está marcada por volcanes y restos más o menos recientes de erupciones. El color amarillento es debido a la gran cantidad de azufre expulsada por los volcanes. Debido a la intensa actividad volcánica, no se aprecian cráteres de impacto, ya que cualquier traza de ellos ha sido rellenada por los flujos de lava en poco tiempo.
Erupciones volcánicas en Ío, mientras estaba a la sombra de Júpiter
Se han registrado temperaturas en las erupciones de más de 1700 K (se cree que algunas han podido llegar a los 2000 K), mientras que en La Tierra raramente se sobrepasan los 1500 K.
Fue descubierta en enero de 1610 por Galileo Galilei, al apuntar a Júpiter con su telescopio. Descubrió también a las otras 3 grandes lunas jovianas, Europa, Ganímedes y Calisto. Ha sido visitada por las sondas Voyager, la Galileo y la New Horizons, de camino al lejano Plutón.
NOTA: Las temperaturas se expresan en grados Kelvin (K). 0ºC = 273 K, 100ºC = 373 K
Y para terminar, les dejo un par de vídeos de Ío, espero que les gusten.